1 Fragmento del discurso a los participantes en el Encuentro mundial de los movimientos populares, 18 de octubre de 2014.

2 Fragmento del discurso pronunciado con ocasión de la entrega del premio Carlomagno, 6 de mayo de 2016.

3 Este moderno edificio, construido en la parte trasera de San Pedro durante el pontificado de Juan Pablo II y acabado en 1996, sirve de residencia a los cardenales durante los cónclaves. Tras su elección, el papa Francisco, que se sentía más cómodo y menos solo entre los otros miembros del clero, decidió quedarse allí «hasta nueva orden».

4 Las palabras marcadas con un asterisco fueron pronunciadas en francés.

5 Acuerdo Unión Europea-Turquía del 18 de marzo de 2016. Este acuerdo prevé el envío a Turquía de las personas llegadas de manera irregular a Grecia después del 20 de marzo de 2016, y que no han pedido o recibido asilo.

6 Pío XI (1857-1939), papa de 1922 a 1939, está un poco olvidado en nuestros días. Sin embargo, desempeñó un papel esencial en un período muy turbulento. Firmó los acuerdos de Letrán (1929) sobre el abandono de los Estados pontificios. Firmó asimismo concordatos con los Estados creados en 1918. Condenó la Acción francesa en 1926, los excesos del fascismo en 1931, del nazismo en 1937 y del bolchevismo en 1937. Lanzó una solemne llamada a la paz en 1938. Por otra parte, es el papa de la acción católica (apostolado de los laicos) y de las misiones.

7 Conferencia de prensa durante el vuelo de regreso de México, 17 de febrero de 2016.

8 Un poliedro es un sólido delimitado por caras poligonales cuyas intersecciones forman las aristas, y los puntos de encuentro de estas son los vértices. «Por eso a mí me gusta la imagen del poliedro, una figura geométrica con muchas caras distintas. El poliedro refleja la confluencia de todas las parcialidades que en él conservan la originalidad. Nada se disuelve, nada se destruye, nada domina nada, todo se integra...», explica el Santo Padre en un discurso pronunciado el 28 de octubre de 2014.

9 Romano Guardini (1885-1968), sacerdote católico, filósofo y teólogo.

10 La Polarité. Essai d’une philosophie du vivant concret, trad. de Jean Greisch y Françoise Todorovitch, Éditions du Cerf, París 2010 (trad. esp.: El contraste: Ensayo de una filosofía de lo viviente-concreto, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 1996). La Gegensatzlehre es una teoría de la discusión centrada en el pensamiento dialogal.

11 Hombre de Estado israelita, nacido el 2 de agosto de 1923 y fallecido el 28 de septiembre de 2016.

12 Nacido en 1935, ha sido tercer presidente de la Autoridad Nacional Palestina, desde 2005 hasta 2013, y presidente de Palestina en Cisjordania desde 2013 hasta junio de 2014.

13 Visita pastoral a Caserte (Italia), 26 de julio de 2014.

14 Dans un monde qui change, retrouver le sens du politique, Conseil permanent de la Conférence des évêques de France, Bayard-Mame-Éditions du Cerf, París 2016.

15 Último día del viaje a México, miércoles 17 de febrero de 2016. Encuentro con el mundo del trabajo. Colegio de Bachilleres del Estado de Chihuahua, Ciudad Juárez. Esta parte de la entrevista tuvo lugar el 25 de febrero de 2017 (https://w2.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2016/february/documents/papa-francesco_20160217_messico-lavoro.html).

16 Homilía de Benedicto XVI, conocida como «Documento de Aparecida», pronunciada en la explanada del santuario de Nuestra Señora de Aparecida, la santa patrona de Brasil, durante su viaje apostólico a este país con ocasión de la Conferencia general de los obispos latinoamericanos y del Caribe, 13 de mayo de 2007.

17 Evangelii gaudium (La alegría del Evangelio), 24 de noviembre de 2013.

18 Laudato si’ (Alabado seas), 24 de mayo de 2015.

19 Günter Rodolfo Kusch (1922-1979), antropólogo y filósofo.

20 La redacción del texto final estuvo presidida por el todavía cardenal Bergoglio. Este documento se cita a menudo a causa de la influencia que ha ejercido sobre la vida de la Iglesia en América Latina.

21 Visita al Parlamento Europeo, 25 de noviembre de 2014.

22 El premio internacional Carlomagno de Aquisgrán es un premio creado en 1949 y concedido desde 1950 por la ciudad de Aquisgrán (Alemania) a personalidades notables que se han comprometido en favor de la unificación europea. Se concedió al papa Francisco el 6 de mayo de 2016.

23 Encuentro interreligioso por la paz organizado por la comunidad de san Egidio en la ciudad italiana de Asís, instituido por Juan Pablo II en octubre de 1986.

24 «Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo, que de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros» (Mt 5,3-12).

25 Evangelio según san Mateo 25.

26 El 13 de octubre de 2016 se eligió al portugués António Guterres como secretario general de Naciones Unidas.

27 Doctrina según la cual las ideas generales o los conceptos no tienen existencia más que en las palabras que sirven para expresarlos.

28 Gorgias 234: «Lo que la vanidad en el vestir es a la gimnasia, es lo que la cocina a la medicina, o mejor aún de esta manera: lo que la vanidad en el vestir es a la gimnasia, es lo que la sofística a la parte legislativa; y lo que la cocina es a la medicina, es lo que la retórica al arte judicial» (trad. de Luis Roig de Lluis).

29 Basilio Magno (329-379), obispo de Cesarea, doctor de la Iglesia, autor de tratados sobre el Espíritu Santo.

30 La compasión por el sufrimiento del prójimo es, para los cristianos, una bondad que incita a la indulgencia y al perdón para con una persona culpable de una falta y que se arrepiente. La misericordia divina es la bondad de Dios por la que él perdona las faltas del hombre. Cuando Dios tiene misericordia de los hombres, no les da lo que merecerían (su cólera), sino, al contrario, les otorga su gracia, es decir, la vida eterna. Se muestra misericordioso con el hombre para que este lo sea en su vida diaria: «Sed misericordiosos, como vuestro Padre es misericordioso» (Lc 6,36).

31 David tuvo el orgullo de querer conocer el número exacto de las personas que poblaban su reino y fue castigado con el envío de la peste. Por analogía, realizar aquí un balance preciso es hacer un censo y pecar de orgullo.

32 Estos pecados son la profanación de especies consagradas (santas Especies, o Especies eucarísticas, es decir, el pan y el vino transformados en el Cuerpo de Cristo), la absolución del cómplice, la consagración episcopal sin mandato pontificio, la violación directa del secreto de confesión y la violencia contra la persona del papa.

33 Marcel Lefebvre (1905-1991), superior general de los Padres del Espíritu Santo, que se opuso al concilio Vaticano II, fundó la Fraternidad sacerdotal San Pío X y el seminario de Écône. Fue excomulgado en 1988.

34 Hay catorce obras de misericordia, siete corporales y siete espirituales. Las primeras recogen las indicaciones de los Evangelios, sobre todo las del capítulo 25 de Mateo: «Dar de comer a los hambrientos, dar de beber a los que tienen sed, vestir a los que están desnudos, acoger a los extranjeros, asistir a los enfermos, visitar a los prisioneros, sepultar a los muertos». Las obras espirituales forman una lista de gestos muy concretos y ordinarios que afectan a todos los ámbitos de la vida de amistad, de familia, profesional o eclesial: «Aconsejar a los que se debaten en la duda, enseñar a los ignorantes, advertir a los pecadores, consolar a los afligidos, perdonar las ofensas, soportar con paciencia a las personas molestas, orar a Dios por los vivos y por los muertos».

35 Dios rico en misericordia, segunda encíclica escrita por Juan Pablo II en 1980 y publicada el 30 de noviembre de ese mismo año.

36 Los longobardos (lombardos), pueblo germánico originario de Escandinavia, instalado en la península Italiana en el siglo VI, dieron su nombre a la actual Lombardía.

37 Fiesta cristiana que celebra la venida del Espíritu Santo, cincuenta días después de Pascua, sobre los apóstoles y las personas que estaban presentes con ellos, y narrada en los Hechos de los Apóstoles. Concluye oficialmente el tiempo pascual y da a la Iglesia las primicias de su misión: anunciar la buena nueva de la resurrección de Cristo a todas las naciones.

38 Hch 8,26-40.

39 Matteo Ricci (1552-1610), jesuita italiano, muerto en Pekín, fue el primer europeo que asimiló la cultura china. Inventó la transcripción del mandarín con letras latinas.

40 Roberto de Nobili (1577-1656), jesuita italiano, misionero en el sur de la India y precursor de los estudios indios, inquietó a la Iglesia por su método de inculturación de la fe cristiana.

41 Mateo 23,22-26.

42 Mateo 6,24-34.

43 Cf. Jean-Marie Lustiger, Le Choix de Dieu, entretiens avec Dominique Wolton, B. de Fallois, 1987 (trad. esp.: La elección de Dios, Planeta, Barcelona 19895).

44 El concilio de Calcedonia (451) reafirmó el dogma de la Santa Trinidad estableciendo la doble naturaleza, divina y humana, de Cristo en una perfecta fusión. Pero la información se trasladó a los armenios de una manera confusa, lo que les llevó a condenar la doctrina de Calcedonia y, por vía de consecuencia, a preferir el monofisismo.

45 Narsés falleció el 25 de junio de 2015.

46 El viaje tuvo lugar del 24 al 26 de junio de 2016.

47 La Carta a Diogneto es obra de un autor cristiano anónimo, va dirigida a un pagano de alto rango llamado Diogneto, y data de finales del siglo II. Se trata de un escrito apologético dirigido a demostrar la novedad radical del cristianismo con respecto al paganismo y al judaísmo.

48 Charles Péguy (1873-1914), escritor, poeta y ensayista, fue bautizado cuando nació, pero no «encontró» la fe católica hasta 1907.

49 La expresión «teología de la liberación», nacida en América Latina, fue empleada por primera vez por el sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez en una obra suya del mismo título aparecida en 1972. Esta teología constituye una requisitoria contra el capitalismo, y reclama otras doctrinas y prácticas políticas. Utiliza los métodos de análisis marxista y preconiza la liberación del pueblo para recuperar la tradición cristiana de la solidaridad.

50 Joseph Malègue (1876-1940), Augustin ou Le Maître est là, Spes, 1933.

51 Louis Billot (1846-1931) fue creado cardenal en 1911 por Pío X. Su desacuerdo con la condena de la Acción francesa por Roma en 1926 le condujo a dimitir al año siguiente.

52 Jean-Marie Vianney (1786-1859), cura de la parroquia de Ars, venerado por la Iglesia católica.

53 Pierre Fourier (1565-1640), religioso agustino, cura de Mattaincourt, estaba muy ligado a la familia ducal de la Lorena. Su compromiso con la renovación de la pastoral educativa le han convertido en un pionero de la Reforma católica.

54 La Compañía de Jesús, la orden de los jesuitas.

55 Discurso al Parlamento Europeo, Estrasburgo, 25 de noviembre de 2014.

56 Ibíd.

57 Declaración del 9 de mayo de 1950, Salón de l’Horloge, Quai d’Orsay, París.

58 Ibíd.

59 Discurso pronunciado con ocasión de la firma de los Tratados de Roma (25 de marzo de 1957).

60 Discurso en la entrega del premio Carlomagno (6 de mayo de 2016): L’Osservatore Romano, 6-7 de mayo de 2016, p. 4.

61 «La voie des sens», Hermès, n° 74, CNRS Éditions, marzo de 2016. La Revista internacional sobre la comunicación como reto científico y político, Hermès, fue creada en 1988 por Dominique Wolton, que la dirige todavía hoy.

62 Lucas 2,22-38.

63 El 13 de noviembre de 2016.

64 Según el informe de 2015 de Twiplomacy, el papa Francisco es el líder más influyente en Twitter. Cuenta con 32 millones de abonados, sobre todo en español (12,5 millones), en inglés (10,2 millones) y en italiano (4,2 millones). Por debajo del millón está el polaco (751.000), el latín (735.000), el alemán (412.000) y el árabe (350.000).

65 Véase https://w2.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2016/september/documents/papa-francesco_20160916_corso-formazione-nuovi-vescovi.html.

66 En el original, leçon de choses: método de enseñanza que consiste en familiarizar a los niños con objetos usuales, con producciones naturales (ndt).

67 «Hoy les pido a ustedes, en este retiro, que sean pastores con la ternura de Dios. Dejar el látigo colgado en la sacristía y ser pastores con ternura» (Homilía pronunciada en el tercer retiro mundial de sacerdotes, basílica de San Juan de Letrán, viernes, 12 de junio de 2015. Véase https://www.aciprensa.com/noticias/dejen-el-latigo-colgado-en-la-sacristia-y-sean-pastores-tiernos-pide-el-papa-a-sacerdotes-30998).

68 Gaudete in Domino (Alegraos en el Señor), 9 de mayo de 1975.

69 Heinrich Joseph Dominicus Denzinger (1819-1883), teólogo católico alemán del siglo XIX. Su obra principal, el Enchiridion (1854), es una colección de textos doctrinales oficiales, cuya edición española de 2012 ya va por la 4ª impresión.

70 Cf. «Langues romanes: un milliard de locuteurs», Hermès, n° 75, CNRS Éditions, 2016.

71 Cantante italiana, nacida en 1940.

72 Centre national de la recherche scientifique. Organismo francés similar al Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España (ndt).

73 «La voie des sens», Hermès, art. cit.

74 Carlos de Foucauld (1858-1916), antiguo oficial del ejército francés que se hizo sacerdote y después ermitaño en el Sahara argelino, consagró su vida a los más pobres. Fue asesinado a la puerta de su ermita el 1 de diciembre de 1916. Fue beatificado por Benedicto XVI el año 2005.

75 Doctrina de Pelagio, monje bretón del siglo V, relacionada con la gracia y con el pecado original, que sostenía que el hombre podía garantizarse su salvación en virtud exclusivamente de sus méritos. Por extensión, doctrina que pone un acento exclusivo en la bondad natural del hombre.

76 L’Univers religieux de Dostoïevski, Éditions du Seuil, 1963 (trad. esp.: El Universo Religioso de Dostoyevski, Emecé Editores, Buenos Aires 19582).

77 «Siervo de los siervos de Dios»: este antiguo título hace referencia indirectamente al mensaje entregado por Cristo al lavarle los pies a Pedro durante la Cena. Era el título preferido de Pablo VI, que hizo que se añadiera a la lista oficial después del concilio Vaticano II.

78 Ludwig von Pastor (1854-1928), historiador y diplomático austríaco, es el autor de Histoire des papes depuis la fin du Moyen Âge. Ouvrage écrit d’après un grand nombre de documents inédits extraits des archives secrètes du Vatican et autres, traducido del alemán por Furcy Raynaud (vols. 1-6), Alfred Poizat (vols. 7-14), Alfred Poizat y W. Berteval, (vols. 15-18), H.-E. Del Medico (vols. 21-22), Plon, Nourrit et Cie, 1888-1961 (trad. esp.: Historia de los papas, Gustavo Gili, Barcelona 1961).

79 Jacques Hamel (1930-2016), sacerdote católico de la archidiócesis de Rouen, asesinado en la iglesia de Saint-Étienne, de Saint-Étienne-du-Rouvray, por dos terroristas islamistas en el atentado cometido en este lugar de culto el 26 de julio de 2016.

80 Gaudium et spes (Gozo y esperanza) es uno de los principales documentos emanados del concilio ecuménico Vaticano II (1965).

81 Vicente, monje de Lérins (fallecido antes del año 450), autor del Commonitorium (Tradición y Progreso) bajo el seudónimo de Peregrinus, trad. de P. de Labriolle, Éditions Migne, 1978 (trad. esp.: El Commonitorio, Apostolado mariano, Sevilla 1991, y Palabra, Madrid 1976).

82 Pedro Claver (1580-1654), sacerdote jesuita catalán, misionero en América del Sur, particularmente entre esclavos africanos, fue reconocido santo por la Iglesia católica.

83 En español en el original (ndt).

84 Rerum novarum (Las cosas nuevas), encíclica publicada en mayo de 1891 por el papa León XIII (1810-1903) y en la que se ponen las bases de la doctrina social de la Iglesia católica.

85 Joaquín de Fiore (ca. 1132-ca. 1202), monje franciscano calabrés, teólogo católico, dividió la historia de la humanidad en tres edades (la del Padre, la del Hijo y la del Espíritu Santo), la última de las cuales llegó, según él, con la Edad Media. Esta teoría trajo consigo un regreso del milenarismo y ejerció más tarde una vigorosa influencia sobre las teorías utopistas y sobre ciertos movimientos revolucionarios.

86 Encuentro, Madrid 2011.

87 Referencia al discurso pronunciado en la presentación de la felicitación navideña de la Curia romana, sala Clementina, el 22 de diciembre de 2014, llamado «Discurso de las quince enfermedades curiales», en el que se enuncian «algunos criterios-guía de la reforma»: «individualidad, pastoralidad, misionariedad, racionalidad, funcionalidad, modernidad, sobriedad, subsidiariedad, sinodalidad, catolicidad, profesionalidad, gradualidad».

88 En español en el original (ndt).

89 Ciudad situada al norte de Argentina.

90 El 5 de marzo de 1953, que es también la fecha de la muerte de Stalin.

91 Ópera de Ambroise Thomas (1866).

92 Ópera cómica de Jules Massenet (1884).

93 Partido revolucionario febrerista, fundado en 1951 en Buenos Aires.

94 Julius y Ethel Rosenberg, miembros del Partido Comunista americano, fueron acusados de haber entregado el secreto de la bomba atómica a la Unión Soviética. Murieron en la silla eléctrica el 19 de junio de 1953.

95 Esther Balestrino de Careaga (1918-1977), paraguaya, próxima a los comunistas, se convirtió en una de las fundadoras de las Madres de la Plaza de Mayo tras el secuestro de una de sus hijas y de su yerno. Fue detenida en diciembre de 1977 junto con dos religiosas francesas, fue torturada y asesinada, después la echaron al mar desde un avión.

96 Jean-Louis Tauran, cardenal francés nacido en 1943, nombrado en 2014 camarlengo de la Santa Iglesia Romana, preside el Consejo pontificio para el diálogo interreligioso.

97 © Libreria Editrice Vaticana.

98 © Libreria Editrice Vaticana.

Papa Francisco

Política y sociedad

Conversaciones con Dominique Wolton

Título original: Politique et société. Rencontres avec Dominique Wolton

© Éditions de l’Observatoire/Humensis, 2017

© Libreria Editrice Vaticana

© de la edición española Ediciones Encuentro, S. A., Madrid, 2018

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100XUNO, nº 32

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«Hace poco dije, y lo repito, que estamos viviendo la tercera guerra mundial pero en cuotas. Hay sistemas económicos que para sobrevivir deben hacer la guerra. Entonces se fabrican y se venden armas, y con eso los balances de las economías que sacrifican al hombre a los pies del ídolo del dinero, obviamente quedan saneados. Y no se piensa en los niños hambrientos en los campos de refugiados, no se piensa en los desplazamientos forzosos, no se piensa en las viviendas destruidas, no se piensa, desde ya, en tantas vidas segadas. Cuánto sufrimiento, cuánta destrucción, cuánto dolor. Hoy, queridos hermanas y hermanos, se levanta en todas las partes de la tierra, en todos los pueblos, en cada corazón y en los movimientos populares, el grito de la paz: ¡Nunca más la guerra!» [1].

«Sueño una Europa joven, capaz de ser todavía madre: una madre que tenga vida, porque respeta la vida y ofrece esperanza de vida. Sueño una Europa que se hace cargo del niño, que como un hermano socorre al pobre y a los que vienen en busca de acogida, porque ya no tienen nada y piden refugio. Sueño una Europa que escucha y valora a los enfermos y a los ancianos, para que no sean reducidos a objetos improductivos de descarte. Sueño una Europa donde ser emigrante no sea un delito, sino una invitación a un mayor compromiso con la dignidad de todo ser humano. Sueño una Europa donde los jóvenes respiren el aire limpio de la honestidad, amen la belleza de la cultura y de una vida sencilla, no contaminada por las infinitas necesidades del consumismo; donde casarse y tener hijos sea una responsabilidad y una gran alegría, y no un problema debido a la falta de un trabajo suficientemente estable. Sueño una Europa de las familias, con políticas realmente eficaces, centradas en los rostros más que en los números, en el nacimiento de hijos más que en el aumento de los bienes. Sueño una Europa que promueva y proteja los derechos de cada uno, sin olvidar los deberes para con todos. Sueño una Europa de la cual no se pueda decir que su compromiso por los derechos humanos ha sido su última utopía» [2].

Introducción
«NO ES FÁCIL, NO ES FÁCIL...»

El proyecto

Hay destinos individuales que se encuentran con la Historia. Este es el caso del papa Francisco que, procedente de América Latina, aporta otra identidad a la Iglesia católica. Su personalidad, su trayectoria, sus actos interpelan a una época dominada por la economía, aunque también por la búsqueda de sentido, de autenticidad y, con frecuencia, de valores espirituales. Este encuentro entre un hombre y una historia es el que se muestra en el corazón de nuestras conversaciones, conversaciones entre un hombre de Iglesia y un intelectual francés, laico, especialista en el campo de la comunicación, y que trabaja desde hace muchos años en la mundialización, la diversidad y la alteridad.

¿Por qué un diálogo? Porque permite una apertura al otro, una argumentación, y la presencia del lector. El diálogo proporciona su sentido a la comunicación humana más allá del rendimiento (performance) y de los límites de las técnicas.

La perspectiva que hemos elegido para este libro se proyecta sobre una de las cuestiones recurrentes de la historia de la Iglesia: ¿cuál es la naturaleza de su compromiso social y político? ¿En qué difiere de la naturaleza de un actor político? Estas cuestiones se plantean cada vez que la lectura del Evangelio, la relectura de los Padres de la Iglesia o de las encíclicas favorecen un compromiso crítico y una acción orientada a los pobres, a los dominados, a los excluidos... Aquellos que se han levantado durante siglos para denunciar las injusticias y las desigualdades han establecido con frecuencia un vínculo directo entre el mensaje político y la espiritualidad. El debate —y los conflictos— sobre la teología de la liberación constituye uno de sus últimos grandes ejemplos. ¿Cómo pensar la dimensión espiritual y distinguirla de la acción política de la Iglesia? ¿Hasta dónde se puede llegar y hasta dónde no? La idea que nos mueve es favorecer una reflexión sobre lo que une y lo que separa espiritualidad y acción política. Esta reflexión es algo que se impone, sobre todo en un momento en el que estamos constatando un retorno de la búsqueda espiritual y en el que, al mismo tiempo, con la mundialización de la información, se vuelven más visibles las desigualdades, algo que trae consigo la urgencia de los compromisos, aunque, en ocasiones, también la simplificación de los argumentos y, a menudo, la voluntad de reducirlo todo a un enfoque político. ¿Cómo se puede evitar que se intente limitar, en nombre de la «modernidad», el compromiso crítico de la Iglesia al de un actor político mundial, primo hermano de la ONU? Los jesuitas, en virtud de su historia, y América Latina, por lo que se refiere a la del papa, constituyen ejemplos palpables de este debate, de la necesidad y de la dificultad que supone preservar una distinción entre estas dos lógicas.

El encuentro

No es posible dominar un encuentro, es un tipo de realidad que se impone. En este caso fue un encuentro libre, no conformista, confiado, lleno de humor. En medio de una simpatía mutua. Al papa se le nota presente, a la escucha, modesto, se advierte en él el peso de la Historia, sin hacerse ilusiones por lo que respecta a los hombres. Me reúno con él al margen de todo marco institucional, en su casa, pero esa ausencia de protocolo no explica todo lo que se refiere a su capacidad de escucha, a su libertad y a su disponibilidad. Recurre poquísimo a las evasivas o al lenguaje estereotipado.

A veces siento vértigo cuando pienso en las aplastantes responsabilidades que recaen sobre sus hombros. ¿Cómo puede decidir y pensar, en medio de tantas presiones y cuestiones apremiantes, y escuchar y actuar, no ya solo en los asuntos que atañen a la Iglesia, sino también en lo relacionado con otra gran cantidad de asuntos relativos al mundo? ¿Cómo se las arregla? Sí, este papa tal vez sea, realmente, el primer papa de la mundialización, a caballo entre América Latina y Europa. Un papa a la vez humano, modesto y, al mismo tiempo, dotado de una gran determinación, con sus dos pies puestos en la Historia. Su rol no tiene nada que ver con el de los grandes dirigentes políticos del mundo y, sin embargo, tiene que confrontarse con ellos constantemente.

La frase tal vez más intensa que ha dicho, de una manera natural, a lo largo de nuestras conversaciones es: «Nada me asusta». Y al mismo tiempo está esta otra frase que pronunció despacio con la puerta entreabierta, al despedirse de mí una tarde, y que nunca olvidaré, por lo mucho que simboliza su humanidad, su apostolado: «No es fácil, no es fácil...». ¿Qué se puede decir más allá de semejante modestia, solicitud, lucidez e inteligencia?

La dificultad consistía en encontrar el nivel posible de este diálogo, un diálogo que incluía, a la vez, tantas diferencias entre nosotros y al mismo tiempo la voluntad de intentar comprendernos, de «derribar los muros» y admitir las incomunicaciones. «No es fácil» hacer hablar a alguien que se expresa ya mucho, muy bien, y con una gran sencillez, y tanto más porque el discurso religioso siempre tiene respuesta para todo, y porque ya está dicho todo... Evitar las repeticiones con respecto a lo que ya conocemos de sus intervenciones, tomar una cierta distancia con respecto al vocabulario religioso y oficial. Buscar la verdad, asumir la incomunicación inevitable cuando esta surgía. Nos hemos quedado más en el ámbito de la historia, de la política, de los hombres, que en el de las dimensiones espirituales.

Por lo demás, este diálogo entre el religioso y el laico podría continuar de una manera indefinida, permaneciendo tan rico en sus convergencias como en sus diferencias. Yo no era un valedor ni tampoco un crítico, era simplemente un científico, un hombre de buena fe que intentaba dialogar con una de las personalidades intelectuales y religiosas más excepcionales del mundo. Esta libertad, que sentí a lo largo de las conversaciones, es profundamente la suya. Él no es ni una persona convencional ni conformista. Además, basta con ver cómo vivía, hablaba y actuaba en Argentina y en América Latina para que nos demos cuenta de ello. Hay una diferencia radical respecto a Europa.

Desde el punto de vista empírico, he empleado el mismo procedimiento, sin darme cuenta, que el que empleé para dialogar con el filósofo Raymond Aron (1981), con el cardenal Jean-Marie Lustiger (1987) y con el presidente de la Comunidad Europea Jacques Delors (1994). La filosofía, la religión, la política. Tres dimensiones que, a fin de cuentas, se encuentran también aquí. Una posición que, a no dudar, ilustra del mejor modo posible la postura del investigador, una especie de portavoz de este ciudadano universal, invisible, pero indispensable para la reflexión sobre la historia y el mundo. Hablar, dialogar, a fin de reducir las distancias infranqueables y permitir un poco de intercomprensión. Paradójicamente, nos hemos encontrado a menudo en el terreno de una filosofía común de la comunicación. Dar prioridad al hombre sobre la técnica. Aceptar la incomunicación, favorecer el diálogo, destecnificar la comunicación para volver a encontrar los valores humanistas. Aceptar que la comunicación sea al menos tanto una negociación y una cohabitación como un compartir. La comunicación como una actividad política de diplomacia.

Los grandes temas

Nuestras conversaciones se escalonaron a lo largo de doce encuentros, que van desde febrero de 2016 a febrero de 2017. Algo, a fin de cuentas, considerable con respecto a los usos y costumbres del Vaticano. Y tanto más por el hecho de que no se había decidido nada previamente. Con frecuencia, las conversaciones desbordaban el marco estricto del libro y no se encuentra todo directamente en el texto, pero eso explica en buena parte el tono, la atmósfera y la libertad de nuestras conversaciones. El papa ha leído, evidentemente, el manuscrito y nos hemos puesto fácilmente de acuerdo.

Los temas abordados acometen las cuestiones políticas, culturales, religiosas que aparecen por todas partes con su carga de violencia: la paz y la guerra; la Iglesia en la mundialización y frente a la diversidad cultural; las religiones y la política; los fundamentalismos y la laicidad; las relaciones entre cultura y comunicación; Europa como territorio de cohabitación cultural; las relaciones entre tradición y modernidad; el diálogo interreligioso; el estatuto del individuo, de la familia, de las costumbres y de la sociedad; las perspectivas universalistas; el rol de los cristianos en un mundo laico marcado por el retorno de las religiones; la incomunicación y la singularidad del discurso religioso.

Estos temas han sido reagrupados en ocho capítulos. En cada uno de ellos he completado nuestras conversaciones con fragmentos extraídos de dieciséis grandes discursos del papa Francisco desde su elección el 13 de marzo de 2013. Estos discursos, pronunciados por todo el mundo, ilustran nuestros diálogos. Están reagrupados de dos en dos en cada capítulo.

En cambio, forma parte de un propósito voluntario el omitir aquí toda referencia a los conflictos políticos e institucionales que existen en el seno de la Iglesia. Además del hecho de que hay gente más competente que yo en estos asuntos y de que ya existe una amplia información al respecto, es algo que no correspondía a lo que a mí me interesaba, a saber: cuál es el sitio de la Iglesia en el mundo y en la política, a partir de la experiencia y del análisis del primer papa jesuita y no europeo de la Iglesia católica.

¿Una hipótesis que pudiera explicar su modo de ser? Desde el punto de vista social, es un poco franciscano; desde el intelectual, un poco dominico; desde el político, un poco jesuita... En cualquier caso muy humano. Probablemente, harían falta muchas otras cosas para comprender su personalidad...

Pequeñas incomunicaciones...

En el Santo Padre todo procede de la religión y de la fe, incluso a la hora de abordar las cuestiones directamente políticas. La misericordia desempeña un papel esencial, así como, por otra parte, la profundidad de una historia y de una escatología cuyos orígenes se remontan a más de cuatro mil años. Mis referencias son más de carácter antropológico, aun cuando, evidentemente, sea imposible eliminar las dimensiones espirituales en la acción de los hombres. Las miradas sobre el mundo son con frecuencia las mismas, aunque no las perspectivas. Las racionalidades y las lógicas no siempre coinciden. Forma parte de la grandeza de la comunicación intentar comprenderse y aceptar las diferencias. Esto ocurre, por ejemplo, con el enigma del mundo contemporáneo, visible, interactivo, donde el rendimiento y la velocidad de la información jamás habían creado tantas incomprensiones e incomunicaciones. Nos encontramos frente a un desafío: pensar la alteridad en este mundo abierto, evitar el monopolio de un solo discurso, religioso o político, favorecer la intercomprensión.

«Acoger, acompañar, discernir, integrar». Los cuatro conceptos clave de la Exhortación apostólica Amoris laetitia (La alegría del amor, marzo de 2016) tienen, después de todo, un cierto alcance general. Especialmente a la hora de reconsiderar esas cuestiones esenciales para el mundo de hoy como son el trabajo, la educación, las relaciones ciencias-técnicas-sociedad, la mundialización, la alteridad y la diversidad cultural, los medios de comunicación y la opinión pública, la comunicación política, lo urbano. Una serie de temas en los que los trabajos de la Iglesia, e incluso de las encíclicas, podrían ayudar a profundizar en otras reflexiones.

No es fácil llevar a cabo estas conversaciones. El papa no responde siempre a las preguntas que se le plantean, en todo caso no en el sentido al que las racionalidades modernas nos han acostumbrado. Nos deslizamos muy pronto hacia referencias de hace varios siglos, o bien con metáforas, o bien con los Evangelios... El «derecho de seguimiento» clásico no existe siempre. Nos encontramos en espacios simbólicos diferentes. En pocas palabras, lo que yo llamo «pequeñas incomunicaciones», pero que concentran todo el interés de este encuentro. Y tanto más por el hecho de que está el tercer compañero, el lector, del que nadie sabe cómo recibirá estas palabras. Dicho de manera resumida: este es un diálogo que no tiene la «racionalidad clásica» ligada a los intercambios intelectuales y políticos habituales. Mejor así, aunque esto provoque algunas sorpresas. Nos encontramos claramente aquí en el interior de una filosofía de la comunicación que se muestra respetuosa con la alteridad.

El interés que presenta la Iglesia al investigador es que prácticamente nunca es moderna. No se encuentra nunca por completo en el tiempo presente, aunque esté comprometida con él, en numerosos combates. Y, evidentemente, es esta postura lo que constituye lo interesante de esta visión del mundo, aun cuando moleste o intrigue. No preocuparse por la modernidad supone unos valores y unas escalas de tiempo que no coinciden con nuestra época, dominada por la velocidad, la urgencia y la mundialización. En tiempos pasados se dio con frecuencia esta coincidencia entre la religión y la política, lo espiritual y lo temporal; sus resultados fueron con frecuencia dudosos... En nuestros días, lo espiritual ya no coincide con lo temporal, al menos en el cristianismo, y este desfase con respecto a la modernidad en todas sus formas constituye en realidad una oportunidad, aunque con la constante dificultad que supone saber qué distancia hay que mantener entre ambos. La modernidad, que en cuatro siglos ha conseguido el triunfo sobre la tradición, se ha convertido en una ideología. Revalorizar la tradición constituye, a no dudar, un medio de salvar la modernidad dominante. La Iglesia católica y, por otra parte, todos los otros recursos —religiosos, artísticos y científicos— también pueden ayudar a ello. En todo caso, todas estas dimensiones fuerzan al diálogo, a la tolerancia y a la intercomprensión. La tradición dominante, contra la que se ha levantado con razón la modernidad durante siglos, puede verse fecundada hoy, a su vez, por otras lógicas diferentes a la suya. Todo salvo la unidimensionalidad, siempre amenazadora, y la reificación del mundo, tal como había predicho la Escuela de Frankfurt allá por 1920.

El trabajo de elaboración de este libro ha durado dos años y medio. Ha suscitado en mí algunas conmociones, un profundo respeto y una auténtica modestia frente a este hombre y a la inmensidad de las responsabilidades que asume.

Al mismo tiempo, este encuentro, en el que reinaba una auténtica libertad, permitía que se pudieran decir muchas cosas. El tiempo quedaba como suspendido. Siempre con esta omnipresencia de la mundialización, que afecta a todas las escalas, a todos los valores y en la que es preciso llegar a pensar a fin de evitar nuevas guerras. Hay que contar asimismo con la importancia creciente de la comunicación y de la incomunicación. En resumen, «informar no es comunicar» y «comunicar es negociar, o mejor aún cohabitar», conceptos que se encuentran en el corazón de mis investigaciones orientadas a intentar hacer cohabitar pacíficamente unas visiones del mundo a menudo diferentes, a veces antagonistas. Por otra parte, se hace posible un cierto optimismo cuando se hacen visibles algunos puntos de encuentro entre los discursos laicos y religiosos, en lo que se refiere a los desafíos planteados por la mundialización. En pocas palabras: recurrir a todo para evitar el odio del otro. La religión cristiana, con su perspectiva universalista, está preocupada en nuestros días por preservar el diálogo, con esas palabras esenciales de «respeto», «dignidad», «reconocimiento», «confianza», que se encuentran asimismo en el corazón del modelo democrático...

París, julio de 2017